No podemos elegir una canción porque todas, las de melodías pop pasadas por el punk y las más sucias de su lado hardcore, dejaron una huella importante y sería injusto hacerlo. Sin embargo, queremos recordar su primer album, “Bleach”, y su tercer y último álbum de estudio -salvando el de caras B, “Incesticide”- “In utero”, ambos injustamente a la sombra de los exitosos “Nevermind” y “Nirvana MTV Unplugged”.

Contestatarios y desinhibidos en “Villa Nellcote”, chateau alquilado por Richards y que, cuentan las crónicas, llegó a albergar a cerca de 70 personas entre músicos, ingenieros de sonido, parejas de todos ellos, aduladores, chupópteros y célebres visitantes como William Burroughs (el hombre que descendió a las infiernos de las sustancias y vivió para contarlo en el icónico “Almuerzo desnudo”), John Lennon o el solista de The Byrds, Gram Parsons…