En cierto modo, espero la réplica del agresor digital, me gustaría abrazarlo sabiendo que hay un océano y cierto anonimato de por medio. El mundo está lleno de fabulosos tarados, cuidémoslos.
pandemia
—Con la nueva normalidad ya no es normal tener monstruos en casa; anda, pon un anuncio en internet a ver si alguien los quiere.
Calienticos en sus casas frente al televisor se quejan y hablan de lo que no harían…
Eso que a muchos mata y a otro centenar exilia, ellos los de los días iguales viven esperando que el día termine.
Eustaquio Putrefacto llevaba desde que murió preparándose las oposiciones para zombie. Estudiar era algo que ni siquiera cuando la sangre le corría por el cerebro se le había dado bien así que ahora, que tenía la cabeza con forma de piedra pómez a medio usar, el esfuerzo le estaba dejando prácticamente en los huesos.