Todos los viernes toma un tren de regreso a casa. En el andén 27 de la estación central de Múnich, Cada viernes, somnoliento, camina por las frías aceras a veces nevadas y siempre heladas. Todos los viernes toma un café. Un café y un croissant, en el quiosco de la estación: La brioche dorée.
Cuenca
Pasaba por aquí y se me escapó un te quiero.
Un te echo de menos, hoy que pasaba por aquí
Transitaba por este 23 de febrero y se me salió de uno de los bolsillos, ésos en los que siempre llevo un roto.
Transitaba por aquí y me sentí ausente.
Espero que nadie tropiece con él, que no moleste, que no detenga el paso rítmico y eficaz del que siempre va y viene a los mismos sitios.
Pasaba por aquí
Debería existir un Dios que evitara que las historias se alargaran más allá de la torpeza.
Un dios que no naciera del miedo a vivir.
Un dios sin premios ni castigos.
Debería existir el dios de los errores.